Germán Posso, líder social de la ‘comunidad de paz’ de San José de Apartadó recibe premio de organizaciones cristianas por sus aportes a la paz
Por Noticias UrabáGermán Graciano Posso, líder social de la ‘comunidad de paz’ de San José de Apartadó, del departamento de Antioquia, en Colombia, fue merecedor del premio Voluntarios para el desarrollo sostenible: cambio climático y resiliencia, en la mención “Voluntario desde el sur”, por su trayectoria en la defensa de los derechos humanos y de la tierra para la construcción de paz por parte de la Federación de Organizaciones Cristianas de Servicio Voluntario Internacional (Focsiv), en Roma.
Este galardón llega a su vigésima sexta edición y es promovido por la Focsiv –que agrupa a 86 organizaciones que trabajan en más de 80 países del mundo– desde 1994 con motivo del Día Mundial del Voluntariado, convocado por las Naciones Unidas cada 5 de diciembre, con el cual reconoce a las personas que se destacan en su compromiso contra todas las formas de pobreza y exclusión, por la afirmación de dignidad y los derechos de cada mujer y hombre, demostrando de este modo un compromiso constante con las poblaciones del sur del mundo.
Una invitación a la Iglesia
Graciano Posso, de 37 años, es un activista involucrado en procesos de resistencia no violenta ante el histórico conflicto armado y se ha plantado en contra empresas multinacionales que a través de proyectos de explotación de recursos naturales han pretendido despojar a los campesinos de estos territorios.
En cuanto al papel de la Iglesia colombiana en el proceso de construcción de paz no ha dudado en reconocer el compromiso asumido por los obispos y sus distintas instancias como la Comisión de Conciliación Nacional (CCN) como por la misma diócesis de Apartadó, sin embargo ha pedido a la Iglesia un mayor acercamiento.
“La idea es poder reunirnos para mirar la difícil situación que estamos viviendo como comunidad de paz”, en una invitación que también ha hecho extensiva a Hugo Alberto Torres, obispo de Apartadó.
Todo por la reconciliación
Asimismo ha asegurado que la Iglesia católica ayudó en la declaración como comunidad de paz el territorio donde es líder. El joven ha vivido capítulos muy duros en su vida: tiene 13 familiares asesinados y ha visto morir a 300 personas pertenecientes a la Comunidad de Paz, matados por diferentes actores armados en 23 años de resistencia pacífica. Aún así le sigue apostando a la resistencia pacífica y es promotor de la reconciliación.
Al recibir este reconocimiento, German agradeció a las organizaciones internacionales que están apoyando su labor, como es el caso de “Operazione Colomba”, un cuerpo de paz no violento surgido en Italia, en la Comunidad “Papa Giovani XXIII”, formado por hombres y mujeres que arriesgan sus vidas para defender otras vidas.