Un soldado muerto por combates con el Clan del Golfo en Urabá
Por Noticias UrabáEl cabo segundo William Jair Rosero Pérez perdió la vida en medio de un combate con el Clan del Golfo en Dabeiba, municipio ubicado en la región de Urabá, al noroccidente del departamento de Antioquia. Según el Ejército, «este grupo pretendía realizar una acción criminal contra la población civil» y la Séptima División, unidad a la que estaba adscrito el uniformado, buscaba evitarla cuando se produjo el enfrentamiento.
Los hechos se registraron en la vereda Chamuscado, zona rural de Dabeiba. En desarrollo de «operaciones militares y dando cumplimiento a las recomendaciones emitidas por los organismos de control», dijo el Ejército, se logró además desactivar un explosivo improvisado.
Sin embargo, mientras el cabo Rosero Pérez «protegía a las comunidades que habitan en esta subregión del departamento», fue atacado, al parecer por miembros de la organización criminal. Uno de los presuntos responsables, un hombre que pertenecería al Clan del Golfo (o Autodefensas Gaitanistas) fue capturado y será llevado ante la justicia.
El comandante de la Séptima División, general Juan Carlos Ramírez Trujillo, expresó su sentido pésame:
Asimismo, en el lugar del enfrentamiento se incautó material de guerra, uniformes y dispositivos de comunicación. Y, desde este lunes, agregó el Ejército, tropas aéreas y terrestres se están transportando a Dabeiba «con el fin de iniciar la búsqueda de los demás responsables de esta acción terrorista».
El Clan del Golfo, el grupo criminal más grande del país, comandado por alias Otoniel, el hombre más buscado por las autoridades colombianas, está presente en 17 departamentos del país, según la Policía. Sin embargo, la organización criminal, también conocida como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), concentra su poder en Urabá, el Bajo Cauca antioqueño y el sur de Córdoba.
Al igual que en el proceso de desarme de la guerrilla de las Farc, en la desmovilización de los paramilitares hubo grupos que no entregaron las armas. Ese fue el caso del jefe paramilitar, alias Don Mario y los hermanos Úsuga David, quienes conformaron el grupo paramilitar Bloque Héroes de Castaño, que después terminó como frente de guerra de las Autodefensas Unidas de Colombia (AGC). Tras la captura de Don Mario, el grupo criminal quedó en manos de la familia Úsuga.
En un primer momento fueron conocidos como Los Urabeños y luego como el Clán Úsuga, hasta la actualidad que son conocidos como el Clan del Golfo. Además de ser una de las organizaciones que maneja gran parte de las rutas del narcotráfico del norte del país, se le atribuye la muerte de líderes sociales, reclamantes de tierras y su participación en la minería ilegal.