La opinión pública en Apartadó estaba a la expectativa de la caminata del candidato Héctor Rangel Palacios anunciada con bombos y platillos por sus activistas políticos.
Del otro lado estaba el equipo de Felipe Cañizález esperando el lance del retador. Al término del evento se vió mucha tranquilidad en el equipo Cañizalista y rostros de preocupación en la tropa rangelista, pues saben que tenían que mostrar mucho más frente a un rival de tantos quilates como Cañizález.
Luego desde la campaña roja salieron a gritar que habían aglutinado a 8mil, otros 20mil y otros hasta 32mil personas. La realidad de acuerdo a los más sensatos que vieron el recorrido estaban entre 4.500 y 5.500 personas, incluyendo una buena cantidad de niños. En algunas tomas se ve con mayor claridad el aforo.
En todo caso un equipo que tiene toda la plataforma y burocracia de la alcaldía; que se estima invirtieron más de 200 millones en el evento y que además, muchas personas fueron por conservar sus puestos u otro privilegio al rededor de la administración, definitivamente estuvieron muy por debajo de las expectativas, como lo reconoció uno de los directivos de la campaña que anunció un desquite para octubre.