Urabá es una de las 9 subregiones en las que se subdivide el departamento de Antioquia.
Históricamente ha sido golpeada por la violencia y la ausencia de oportunidades, pese a la adversidad, también ha demostrado la capacidad de reinventarse como región y enfrentar los nuevos retos que proyecta el camino. Planear y desarrollar su futuro, deben ser un propósito ineludible que deberá estar proyectado con la mira puesta en la correcta integración regional para que la nueva realidad no tome a los municipios del eje bananero por separado y con debilidades institucionales.
Basta hacer presencia en el territorio para entender que Urabá es una completa joya de la naturaleza. Fertilidad en sus tierras, grandes extensiones de cultivos de banano y palma que representan el sustento económico de la región acompañado de la ganadería; riqueza cultural infinita, cantera natural de deportistas; salida al mar. Según la cámara de comercio de Urabá, la región cuenta con más 7.641 empresas registradas, siendo la microempresa la de mayor predominio. Tiene todas las condiciones y ventajas para convertirse en una verdadera potencia económica regional y despensa agrícola de la nación.
Entre los municipios de Chigorodó, Carepa, Apartadó y Turbo suman aproximadamente, medio millón de habitantes. Las presiones del crecimiento poblacional son enormes. De igual forma crece la demanda de servicios públicos domiciliarios y se amplía el crecimiento urbanístico que amenaza con avanzar de manera desordenada y carente de planeación que conserve una idea de región sostenible y proyectada a 20 años con la protección ambiental requerida y la garantía en el sustento en las fuentes de recursos naturales
Muy pronto, Urabá demandará un sistema de transporte masivo lineal que conecte a la región que va en proceso de conurbación entre los principales municipios del eje bananero. Será indispensable pensar en la movilidad de los habitantes en una zona que cada vez se condensa más.
La manera de crecer de forma coordinada, con planeación del territorio, con una autoridad ambiental urbana responsable, con ejecución de obras pensadas de forma articulada y de propósito regional, es la creación de un área metropolitana. Tal como lo define la ley 1625 de 2013, “Las Áreas Metropolitanas son entidades administrativas de derecho público, formadas por un conjunto de dos o más municipios integrados alrededor de un municipio núcleo, vinculados entre sí por dinámicas e interrelaciones territoriales, ambientales, económicas, sociales, demográficas, culturales y tecnológicas que para la programación y coordinación de su desarrollo sustentable, desarrollo humano, ordenamiento territorial y racional prestación de servicios públicos requieren una administración coordinada”
Si bien es cierto que para alcanzar la conformación de esta figura asociativa se requiere de voluntad política y un proceso previo de consulta, este objetivo debe convertirse en una causa común que, unifique a todos los sectores de la población urabaense. No puede perderse la oportunidad de lograrlo, es el momento.
El área metropolitana del valle de aburrá es un gran ejemplo de funcionamiento, planeación, ejecución y sería un referente de mucha importancia para que sirva como ejemplo funcional a la subregión de Urabá. Se espera que, las dos subregiones queden a menos de 5 horas de distancia una vez finalicen las obras de infraestructura vial previstas entre las que se destaca, la construcción del túnel del “Toyo” que tiene como finalidad el mejoramiento de las condiciones de conectividad de Medellín y el Valle de Aburrá con el Urabá antioqueño en donde también se espera tener al menos un puerto de gran envergadura. El de mayor tamaño sería Puerto Antioquia, que se construirá en el corregimiento Nueva Colonia en Turbo.
Todo está dado, ojalá la dirigencia departamental de Antioquia y regional comprenda la urgencia y necesidad de constituir el área metropolitana para que, el desarrollo de Urabá no esté marcado por la improvisación, sino por la planeación, coordinación y el orden. Urabá se lo merece, Antioquia lo necesita y el país lo agradecerá.