Urabá - 12 mayo, 2018

Tecnología contra inundaciones en Urabá

Por Noticias Urabá

Históricamente, Apartadó, en el Urabá antioqueño, ha padecido fuertes inundaciones como la de septiembre del año pasado, que dejó un muerto y 186 familias damnificadas. De hecho, a finales ese mismo año, el Ideam declaró alerta roja por el desbordamientos de varios ríos en esta región.

Para contrarrestar las emergencias, en el municipio se implementó un piloto en el estadio de atletismo Caterine Ibargüen. Se trata del sistema Aquacell, un depósito retenedor de aguas lluvia ubicado bajo tierra para evitar los excesos de este líquido en los terrenos, minimizando la sobrecarga de los sistemas de drenaje. Un desarrollo de la empresa colombiana Pavco.

¿Cómo funciona?

En este caso, el sistema de drenaje consiste en un Tanque de Tormenta, de un volumen de 430 m³, que está bajo la zona verde de la pista de atletismo.

Orlando Polo, ingeniero Sanitario, explica que esta tecnología previene la contaminación del líquido y controla las inundaciones.

La lluvia, según el ingeniero, ingresa al sistema por unas cámaras de desarenación con tuberías y cuenta con un filtro que permite el drenaje. “El agua entra al tanque, se retiene durante la tormenta, para que no se inunde el sector y, después, se aprovecha o se libera de manera controlada por las zonas verdes”, afirma.

Ernesto Guerrero, vicepresidente de Pavco, apunta que “es necesario hacer un manejo sostenible de aguas lluvia, porque las capacidades de las tuberías pluviales no son suficientes y renovar completamente el alcantarillado tampoco es factible, por lo que continuamente se presenta el problema de inundaciones que causan grandes daños a la población y a la infraestructura”.

Por ser una solución puntual solo ayuda a mitigar las posibles inundaciones que se puedan presentar en el área de influencia del proyecto, más no mitiga todas las inundaciones del río Apartadó.

Fuertes inviernos en Urabá

Aunque el gestor de Riesgos de Apartadó, Carlos Montes, señaló que este año no han ocurrido fuertes inundaciones, la región tiene una precipitación promedio de 3.000 milímetros (m.m) al año y, en un día de fuertes lluvias, pueden caer hasta 120 m.m que afectan barrios, zonas rurales y hectáreas bananeras.