Urabá - 2 mayo, 2018

Mangle rojo y blanco, esencial en producción de miel en Urabá

Por Noticias Urabá

La miel de abeja Apis mellifera producida en el corregimiento Bocas del Atrato y en la vereda Leoncito, del municipio de Turbo (Antioquia), proviene en un 45% del mangle rojo, un dato que le permitirá a los apicultores cualificar el producto para potenciar sus ventas.

Miel en Urabá

Diana Carolina Sucerquia, estudiante de la Maestría en Bosques y Conservación Ambiental de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) Sede Medellín analizó el papel de los manglares en la producción de miel.

Durante su investigación analizó el polen, la relación entre frecuencias de visitas de abeja melífera a mangle rojo y mangle blanco (Laguncularia racemosa) y la polinización. El registro lo hizo tres veces al día durante 20 minutos.

Así, determinó que el polen del mangle rojo es fundamental, ya que produce grandes cantidades que las abejas toman en muy poco tiempo.

Con respecto al néctar la estudiante señala que “otras investigaciones han mostrado que este tipo de mangle no lo produce, pero en mi estudio hallé que tienen nectarios extraflorales y fluidos azucarados que representarían la atracción de la abeja”.

Otras especies vegetales importantes para la alimentación de la abeja melífera son las de los géneros Amanoa guianensis, Raphia taedigera y Pterocarpus officinalis, pertenecientes al bosque aluvial, ubicado detrás de los manglares.

La Apis mellifera, también conocida como abeja europea, es la especie más utilizada en apicultura en el país debido al rendimiento, ya que colecta gran cantidad de polen y néctar, de ahí la importancia de estudiarla, así como al mangle rojo y blanco, unas de las especies vegetales predominantes en el golfo de Urabá.

Pan de abejas y polen, bajo diagnóstico

La investigación de Diana Carolina Sucerquia tuvo en cuenta el pan de abejas, una especie de masa que se forma después de la transformación del polen, el cual sirve de alimento para los ejemplares adultos y para sus larvas.

Tanto este producto como la miel de un apiario del corregimiento Bocas del Atrato y de otro de la vereda Leoncito se colectaron cada mes durante un año. A las muestras se les aplicaron procesos químicos para el análisis en el Laboratorio de Palinología de la U.N. Sede Medellín.

Además, usando un microscopio, se contabilizaron los granos de polen después de aplicar en el cuerpo de las abejas una sustancia denominada gelatina glicerinada.

En los análisis de las muestras de mangle blanco se encontraron 4.809 granos de polen, de los cuales 4.548 fueron de Apis mellifera, una especie introducida de colonias más grandes, con mayor capacidad de vuelo y de mayor tamaño que los de especies de abejas nativas sin aguijón Trigona fulviventris y Nannotrigona mellaria.

Otros hallazgos

En muestras de miel y de pan de abejas de las dos áreas rurales se observó polen proveniente del árbol yarumo (Cecropia peltata) que no está presente en la vereda Leoncito, el cual está más conservado, a diferencia del corregimiento Bocas del Atrato, donde hay más presión en el ecosistema debido a la actividad humana.

La estudiante señala que al parecer esta situación se da no por condiciones de contaminación de área sino porque las especies del género Cecropia producen líquidos azucarados que atrae a las abejas.

El análisis de las visitas se hizo mediante un sistema binario y un software estadístico que estableció los enlaces entre los insectos y las dos especies de mangle.

Sin embargo la abeja melífera no establece relaciones mutualistas con los manglares, puesto que no les ofrecen beneficio sino que solo se alimentan de ellos.

En total, de 218 insectos solo ocho fueron Apis mellifera, lo que indica que “no están muy distribuidas en el área y que todavía se puede hacer algo para implementar la actividad apícola con especies de abejas nativas y evitar posteriores daños en el manglar, dado que las Apis mellifera desplazan a otros polinizadores y esto altera el ciclo”, concluye la futura magíster.