Hoy en último debate, la Asamblea de Antioquia definirá el traslado al sector de Los Playones del municipio de Murindó, en la región de Urabá.
La decisión definirá el futuro de 579 familias que hoy habitan el casco urbano, en el sitio El Guamal, el cual permanece varios meses del año en las temporadas de invierno, bajo las aguas del río Atrato.
Según informó la Gobernación de Antioquia, el sitio donde se planea construir la nueva zona urbana tiene un área de 100 hectáreas que ya las tiene reservadas para tal efecto.
En el segundo debate de la duma, que se llevará a cabo hoy, la Gobernación de Antioquia dará a conocer los recursos disponibles para la ejecución del traslado, el cual, según había anunciado el gobernador Luis Pérez Gutiérrez, tendría un costo aproximado a $25 mil millones.
Con el fin de dar orden al proceso del traslado y tener plenamente identificadas a las familias, el gobernador de Antioquia, en compañía del alcalde de la localidad, Jorge Eliécer Maturana Úsuga, hicieron entrega, el pasado viernes, en la Notaría 21 de Medellín, del censo de las 579 familias que serían beneficiadas con el traslado de la cabecera municipal.
Precisamente, estas familias se reunieron también la semana pasada con los diputados de la Asamblea Departamental de Antioquia, allí, según John Jairo Estrada Mesa, asesor del Despacho del Gobernador y encargado de la reubicación del municipio, se constató el interés que tiene la comunidad de ser trasladada lo más pronto posible hacia un territorio que ofrece nuevas oportunidades.
Por su parte el alcalde de Murindó, calificó el proyecto como el más importante en la historia de la población y celebró que se unan esfuerzos entre la Gobernación y la Presidencia para que el sueño se cumpla antes de terminar el 2020.
El mandatario de los murindoceños indicó que si se aprueba la reubicación, de inmediato tramitará los permisos ambientales y de aprovechamiento forestal con Corpourabá para abrir la carretera terciaria que arrancará del actual Murindó, pasará por Los Playones y culminará en límites con el departamento de Chocó, para que queden faltando solo 20 kilómetros para unirse con la vía al Mar, en Mutatá.
Carlos Albeiro Ramos, exsecretario de Planeación de Murindó, recordó que en medio de la emergencia originada por dos terremotos en 1992 que arrasaron la población, a sus moradores los reubicaron en un lote en una zona de inundación del río Atrato, lo que cambió su vocación agrícola y ganadera y muchos se dedicaron a la pesca.
Indicó que debido a que Murindó pasa casi 9 meses bajo las aguas del Atrato, desde hace varios años han pedido la reubicación a un terreno, ubicado a 14 kilómetros del actual casco urbano, el cual les permitirá retornar la crianza de ganado y los cultivos de pan coger.
