Los labios mayores y los labios menores son áreas del aparato reproductor femenino que conforman la entrada a la vagina. Los labios mayores rodean a los menores y ambos protegen el clítoris y la uretra.
Estas estructuras pueden sufrir diversas deformaciones, bien sea por el parto, el uso de ropas ajustadas, práctica de actividades como la bicicleta o la hípica o por las relaciones sexuales. Los labios menores pueden sufrir un alargamiento antiestético que se corrige con cirugía.
Cirugía en los labios menores
Según explica en su web el cirujano plástico Mario Carranza García, los labios menores pueden sufrir un alargamiento y adquirir un aspecto flácido debido a cambios de peso o al embarazo. Este problema estético puede arreglarse con una cirugía reductora que devuelva a la zona su aspecto original. Además, según informa el experto, los labios menores también pueden padecer malformaciones debidas a la presencia de lesiones como quistes, tumores o por el uso de pircings vaginales. En este caso, se recomienda una reconstrucción denominada labioplastia.
Cirugía en los labios mayores
Los labios mayores presentan con frecuencia una atrofia que los reduce y requieren una intervención para alargarlos. Según el doctor Carranza, esta cirugía es similar a la que se aplica en los labios faciales, con una inyección que aumente el volumen. Lo más frecuente es utilizar tejido graso de la propia mujer como material inyectable.
