En la historia del conflicto armado en Colombia la región del Urabá representa un ícono de la violencia del país. Las primeras incursiones paramilitares en esta zona del país fueron en 1988. Antes había presencia de las guerrillas de las Farc y del Epl en la región, “pero no fue hasta la llegada de ‘Los Mochacabezas’, como los pobladores reconocían a estos grupos paramilitares, que la violencia se disparó”, así lo señaló Rutas del Conflicto.
La región del Urabá ocupa el 18,5 % del área del departamento y concentra el 10,3 % de la población de Antioquia. Cuenta con once municipios agrupados en tres zonas geográficas: norte de Urabá, Centro de Urabá y Atrato medio.
Entre 1988 y 2002 Urabá sufrió 103 masacres en el marco de la guerra, según documentó el Centro Nacional de Memoria Histórica. Estos hechos ocurrieron en su mayoría en el Eje Bananero, compuesto por los municipios de Turbo, Apartadó, Chigorodó y Carepa.
Según la Unidad para las Víctimas, de los 747.340 habitantes del Urabá, 504.933 han declarado ser víctimas de la guerra, es decir, el 67,5 % de la población total de esta subregión de Colombia. Este jueves, la entidad estatal realizó una jornada de atención a 1.125 víctimas del conflicto armado.
Las personas recibieron la indemnización administrativa, recursos que ascienden a los 12.518 millones de pesos y que se entregaron teniendo en cuenta la ruta general y los criterios de priorización por discapacidad, enfermedad y ser mayores de 68 años o más.
Adicionalmente, se hará este viernes en el municipio de Apartadó otra jornada en la que se entregarán 263 cartas, por valor de 3.010 millones de pesos y 192 en Turbo, por valor de 2.235 millones de pesos. “Se avanzará luego hacia los demás municipios programados, ocho del departamento de Antioquia y tres del Darién chocoano”, indicó la Unidad para las Víctimas.
“Hemos entregado alrededor de 21.000 millones de pesos. Ha sido un verdadero reto lograr que mes a mes se estén realizando estas significativas entregas, además del acompañamiento y la asesoría en la adecuada inversión de estos recursos para que se logre una verdadera transformación en la vida, sueños, proyectos y emprendimientos de las víctimas beneficiadas”, destacó Elizabeth Granada Ríos, directora de la Unidad para las Víctimas Urabá Darién.
Por medio de un comunicado, la Unidad para las Víctimas le hizo un llamado las víctimas del conflicto armado que recibieron estas indemnizaciones a estar atentos, a denunciar las actuaciones de personas que buscan lucrarse con el dinero de la indemnización, pidiendo porcentajes.
En ese sentido, “se reitera que la Unidad para las Víctimas no hace convocatorias por cadenas de WhatsApp, Facebook, oficinas clandestinas u otras redes sociales para tramitar la indemnización. Todos los servicios son gratuitos y deben solicitarse en los puntos de atención o el Centro Regional del Obrero”, explicó la entidad.
“Además, tenemos canales virtuales a través de la página www.unidadvictimas.gov.co y nuestra línea directa 607 5949764 para esta zona del país que comenzó a funcionar desde el 18 de julio”, concluyó la Unidad para las Víctimas.
Hoy en día, la percepción de varios actores locales es que en el Urabá persiste la violencia y que, para que haya una paz completa, es necesario que el próximo Gobierno nacional genere escenarios de diálogo con los grupos armados ilegales y proteja a las comunidades. Para algunas autoridades locales y organizaciones de cooperación internacional, estos grupos representan uno de los principales retos para la implementación del Acuerdo Final de Paz en la subregión.