Urabá - 8 febrero, 2017

El sector bananero en Urabá no financió grupos paramilitares

Por Noticias Urabá

Hace una semana la Fiscalía General de la Nación indicó que el delito de financiación de grupos paramilitares es un delito de lesa humanidad. El objetivo, que las investigaciones sobre los auspiciadores de estos grupos que cometieron delitos tan graves no se diluyan en el tiempo y terminen en la impunidad.

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A este requerimiento, el gremio bananero le salió al paso y Juan Camilo Restrepo, presidente Augura (asociación que agremia a las empresas bananeras), expresó que ellos no dieron recursos a las Autodefensas, que los tres centavos de dólar entregados a las Convivir fueron en su momento bajo la legalidad, y que acudirán a la Fiscalía para atender este requerimiento judicial.

¿A quiénes agremia Augura?

“Agremia a productores y comercializadores del banano colombiano. Son 35.000 hectáreas en Urabá donde tiene una gran característica y es la responsabilidad social que hemos tenido especialmente en los últimos 25 años, más de 600.000 millones de pesos en mantenimientos de vías, en educación, en salud; más de 13.000 soluciones de vivienda para nuestros trabajadores, respeto por la actividad sindical, y por eso es un gremio que tiene una gran fortaleza por todo lo que significa en Urabá. No está alejado del diario vivir de Urabá, pero agremiamos el 100 por ciento de los bananeros urabaenses”.

¿Cómo se ve afectados los bananeros con el pronunciamiento de la Fiscalía en el que aseguran que los delitos de financiación por los bananeros a los grupos paramilitares serán delitos que no preescribirán?
“En la medida que no solo internamente sino internacionalmente sigan estigmatizando el banano, se corre el riesgo, los avances y la estabilidad de la zona. Cuando uno estigmatiza la zona de Urabá y el sector bananero, lo que corre peligro es la generación de empleo, la estabilidad de la zona, el comercio exterior, además es una estigmatización que no le hace bien ni a la zona de Urabá ni a Colombia. Cuando tu sales a EE.UU. y a Europa, y el titular es que nosotros patrocinamos los paramilitares, no puede ser. Hacia afuera le estamos diciendo que cuando usted compra un banano colombiano, está comprando un banano de reconciliación, un banano que respeta el medio ambiente, que respeta la actividad sindical, que mantiene el empleo, que está certificado por normas internacionales, esas son las implicaciones que esto tiene”

¿Pero los señalamientos de la Fiscalía van más allá de una estigmatización? ¿Por qué el ente investigador insiste desde hace algunos años en esta hipótesis de financiación?
“La Fiscalía se ampara en algunas versiones, pero que en buenahora nosotros vamos a acudir a decir que eso no es cierto para demostrar que los tres centavos de dólar que nosotros aportamos se aportaban a una actividad legal, institucional, y a una figura que creo el mismo Estado. Si ellos dicen que eso era patrocinar grupos paramilitares, nosotros decimos no, eso era patrocinar entidades que el mismo Estado creó, motivó y auditaba. Por eso vamos a acudir a la Fiscalía, a hacer esa gran diferenciación que no le es dado al privado si en un momento dado la Fiscalía dice que algunos grupos de esos, o algunos integrantes, terminaron en grupos paramilitares. Eso no puede ser aducible al empresariado bananero colombiano. No puede ser que el sector bananero colombiano asista al llamado del Estado y después termine por la misma omisión de este sindicándolo de que patrocinó grupos paramilitares”.

¿Pero esos aportes a las Convivir se pudieron convertir en fachada para canalizar recursos que terminaron en manos de las autodefensas?
“Son unas versiones que están en la Fiscalía, no hay ninguna sentencia. La Fiscalía asumió unos testimonios en Justicia y Paz y con esos testimonios es que están avanzando esas investigaciones. No hay frente a estas implicaciones cómo mediante los tres centavos de dólares nosotros financiamos grupos paramilitares. Una cosa son esos tres centavos de dólar y otra financiarlos. Por eso vamos a acudir a la Fiscalía para separar lo que fueron las actuaciones de Chiquita Brands o de multinacionales que no se pueden aducir a los bananeros colombianos, que ahí es donde la gente mezcla. Chiquita reconoció en los tribunales de Norteamérica que no solamente financió paramilitares sino que ayudó con un cargamento; eso quedó demostrado, una comercializadora que no era colombiana. No teníamos porque patrocinar grupos paramilitares porque no los creamos los bananeros.
Hablando de la violencia en Urabá, hubo una gran intensidad en la década de los 90 y el desplazamiento que sufrió la actividad bananera como tal es amplia: empresarios, fincas abandonadas, trabajadores bananeros y administradores de fincas asesinados. Cuando los paramilitares entraron por el norte hacia el eje bananero entraron siendo victimarios y nosotros las víctimas”.

¿En algún momento el gremio bananero dijo que no seguirían aportando los tres centavos de dólar a las Convivir, que fueron legales, porque de allí nacieron grupos paramilitares?
“Se dejó de aportar cuando el mismo Estado, que fue quien las creó, hizo que desaparecieran en el año 2004. Es el mismo Estado quien promocionó las empresas de vigilancia y seguridad privada y una vez se termina se deja de dar los aportes. Tres centavos de dólar que están contablemente soportados en las empresas. No es que nosotros aportábamos por debajo de la mesa o bajo la intención de patrocinar grupos paramilitares. Estábamos con el convencimiento de que esa era el Estado, era la institucionalidad”.

Pero para el 2004, cuando ustedes dejaron de aportar a las Convivir, el paramilitarismo nacido de allí estaba muy vivo en Urabá. ¿Desconocían esta situación?

“Totalmente. Nosotros acudimos a un llamado del Estado, nosotros no creamos los grupos paramilitares. Ahora, si hay algunos actores de las Convivir y algunas personas que hacían parte de ellas, que se convirtieron en paramilitares, ¿por qué tiene que ser culpa del sector bananero? Quien auditaba, quien vigilaba y le hacía seguimiento era el Estado, y fue el mismo Estado quien las acabó. No me pueden decir que por una omisión del Estado, los bananeros tengan que pagar por el sufrimiento causado por los paramilitares”.

¿El soporte contable de los tres centavos de dólar entregados a las Convivir es un argumento suficiente para demostrar a la Fiscalía que no financiaron a los paramilitares?
“Ese es el argumento. La prueba de que estábamos consientes de que acudíamos a un llamado del Estado era la auditoría que tenían contablemente sobre los mismos. Ese es un argumento de peso. Ellos nos llaman, nos muestran (las Convivir), yo aporto visiblemente bien, después el Estado las acaba y uno las tiene que retirar. Chiquita que responda pero no pueden coger los tres centavos de dólar y mezclarnos en el paramilitarismo en Colombia”.

¿Usted podría afirmar que ningún empresario bananero financió grupos paramilitares?
“El sector bananero colombiano no financió grupos paramilitares y mediante los tres centavos de ninguna manera. La responsabilidades son individuales, no empresariales, pero no se puede generalizar y mezclar eso con lo de Chiquita. No faltaba que el sector bananero y que Augura fuera a entrara a determinar esos grupos; tiene que ser vencido en juicio”.

¿Los bananeros fueron víctimas de guerrillas y paramilitares? ¿Hubo extorsiones a este gremio?
“Hubo desplazamientos y asesinatos de trabajadores bananeros y muchos empresarios por fuera por los unos y los otros, todo por la ausencia del Estado. Cuando fue a dar una solución creó las empresas de seguridad privada. Esto fue una política nacional auditada por el superintendente de turno”.

Ahora que se habla de proceso de paz y se crea la Justicia Especial para la Paz, ¿los bananeros estarían dispuestos a ir allí a contar lo que pasó?
“Nosotros estamos con la institucionalidad, estamos abiertos a contarle a Colombia y al mundo que no patrocinamos grupos paramilitares. En lo que tiene que ver si asistimos o no y qué pasa con eso hay que partir de la base que todavía le faltan dos debates para la aplicación de la JEP. No puedo profundizar porque nadie sabe cómo va a operar. Lo que podemos decir hoy frente al llamado de la Fiscalía es que estamos listos”.

Pero en un escenario futuro si son llamados a contar verdades, ¿el sector bananero acudiría?
“Yo no puedo negar o afirmar algo que aún no está creado. Le falta dos debates para crearse. El sector bananero no puede pronunciarse frente a la JEP. Lo que hoy podemos definir frente a la posición de la Fiscalía es aclarar que los tres centavos de dólar no era para financiar a los paramilitares”.

¿Qué argumentos tienen como sector bananero para enfrentar las acusaciones de paramilitares como Raúl Hasbún, quien también fue bananero?
“Contando la verdad, y si él acudió a la Fiscalía a contar la verdad, nosotros acudiremos en todo nuestro derecho como empresarios, como personas que hemos llevado el desarrollo al a zona, Aquí lo que no puede pasar es creer que el desarrollo a la zona lo llevaron la guerrilla o los paramilitares y no el sector bananero, y la forma de desvirtuar es decir que los tres centavos de dólar no fueron ilegales, fue por un llamado del Gobierno. No puede pasar que al contar la historia quedemos nosotros como los malos del paseo”.