Familia venezolana que llevaba una semana varada en Medellín, ya se encuentra en Necoclí
Por Noticias UrabáLa familia venezolana que llevaba una semana varada en Medellín, y que había montado un campamento junto al río, ya está en Necoclí. Desde ese municipio de Urabá esperan continuar su viaje hacia Estados Unidos. Sin embargo, su situación no es más alentadora. Deben reunir plata para cruzar el golfo en lancha y ahí sí emprender lo peor, cruzar la selva del Darién.
El domingo, después de que EL COLOMBIANO publicó la historia de la familia, un hombre se les acercó a ofrecerles ayuda. Dos días después llegó con un bus y los llevó hasta el Urabá antioqueño.
Aunque eso podría parecer una buena noticia, no lo es del todo, pues todavía están sin recursos. Y es que atravesar el golfo cuesta 190.000 pesos por persona, adicional a un impuesto de 100 dólares que a veces cobran los traficantes por cabeza.
Albany Rosales, una de las líderes de la familia, cuenta que están en la misma situación que vivieron en Medellín: durmiendo a la orilla y confiando en la solidaridad de la gente. Lo más preocupante es que en el grupo, que está conformado por unas 40 personas, hay 18 menores de edad. Cruzar el Darién, con todo lo que implica atravesar la selva más densa del planeta, es un riesgo enorme para los menores de edad.
En 2021, según Unicef, 19.000 niños cruzaron la selva. Ese mismo año, un equipo periodístico de EL COLOMBIANO atravesó la frontera entre Colombia y Panamá, a pie, acompañando a los migrantes que en ese momento hacían la travesía. En los videos registrados por este medio quedaron grabados los gritos desgarradores de los niños que se enfrentaban al recorrido.
Yonatan Rivera, el esposo de Albany, contó que en Panamá tienen un familiar que está dispuesto a ayudarles en su tránsito hacia los Estados Unidos. La idea es, una vez llegados a ese país, pasar unos días y recoger plata para lo que resta.
La familia venezolana es solo una cara de la trágica situación migratoria que vive el continente. Desde el año pasado se han visto campamentos similares de migrantes varados. Los alrededores de la Terminal del Norte han sido el escenario, donde las personas, con resignación, han cocinado y dormido a la espera de un pasaje que los acerque al sueño americano.
Las cifras del servicio de migración panameño indican que por el Darién pasaron 248.000 personas en 2022, muy por encima de los 133.276 que lo hicieron en 2021. La mayoría, unos 150.000, según el gobierno panameño, fueron de origen venezolano. Es un drama masivo.