La vía que conecta Medellín hacia el Urabá antioqueño permanecerá cerrada durante tres días más hasta que se pueda remover el material rocoso, debido al deslizamiento que se dio en la zona el pasado martes (8 de marzo) en la mañana.
En ese sentido, la concesión Autopistas del Urabá espera que se habilite un carril de la vía el próximo viernes 11 de marzo. Actualmente, los vehículos que necesiten desplazarse hacia el Urabá antioqueño tendrán que tomar la vía Caucasia-Montería-Necoclí.
Los hechos se registraron ayer en la mañana entre los municipios de Uramita y Dabeiba, a la altura del sector Piedras Blancas. En el lugar en donde cayeron aproximadamente 40.000 metros cúbicos de material. El director del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Antioquia (Dagran), Jaime Enrique Gómez, señaló que en el lugar trabajaron 40 obreros que lograron evacuar 135 metros de material.
Por otro lado, señaló que los cuerpos bomberiles de los municipios de Cañasgordas y Frontino están trabajando con ayuda de caninos para identificar si hay personas atrapadas. “Primero y más importante, proceso de búsqueda y rescate en conjunto con la máquina de la concesión y los cuerpos de bomberos que nos están ayudando”, afirmó el funcionario.
Las fuertes lluvias que han caído en la subregión de Urabá tienen en alerta a cinco municipios por el incremento del caudal de los ríos. Ya han ocurrido inundaciones y hay comunidades incomunicadas.
Entre los municipios más afectados se encuentra el distrito de Turbo y los municipios de Apartadó, Carepa, Chigorodó y Murindó, poblaciones que ya registran viviendas y cultivos afectados.
En el distrito de Turbo se reportaron inundaciones tras el desbordamiento del río Grande, lo que provocó la afectación de los corregimientos Currulao, El Tres, Río Grande y Nueva Colonia. Según el Dagran, aún no se reportan daños materiales.
En Apartadó, de acuerdo con Corpouraba, entidad ambiental que es parte de los consejos municipales de gestión del riesgo de esa subregión, se ha presentado un alto nivel del río Apartadó que generó inundaciones en la cancha del barrio San Fernando.
Además, en la zona rural se presentaron afectaciones en seis sectores y, según Dagran, hay movimiento en masa en la vereda La Victoria, que obstruye la vía.
En cuanto a Carepa, el desbordamiento del río colapsó el alcantarillado inundando el casco urbano y otras zonas, por lo que próximamente se podría declarar calamidad pública en el municipio. Cuatro veredas también se vieron afectadas por la creciente: Casa Verde, Mi Lucha, Primavera, Bosque y Los Almendros.
De igual manera, las lluvias demoraron la entrada en operación del aeropuerto Antonio Roldán Betancur este domingo, que inició labores a las 10:00 de la mañana.
Murindó es el municipio en donde se reporta la situación más crítica, pues el desbordamiento del río obstruyó el afluente en aproximadamente tres kilómetros. Hasta el momento, según el Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Antioquia, “el saldo preliminar es de 85 familias afectadas y 5 comunidades indígenas incomunicadas”.
Así mismo, el alcalde de Murindó, Sebastián Valencia Mena, indicó: “Necesitamos intervenciones inmediatas en el hospital para mitigar riesgos de inundación”.
Finalmente, en Chigorodó se presenta inundación en las veredas Veracruz 1 y El Coco.
Derivado de esta situación, el gobernador de Antioquia sobrevoló la zona para consolidar las afectaciones que han causado las lluvias y mostró su solidaridad con las comunidades afectadas.
“En este momento estamos realizando la sala de crisis aquí en las oficinas del Dagran, pero adicionalmente un equipo se encuentra realizando un sobrevuelo por Murindó y los demás municipios del Urabá antioqueño”, señaló también Jaime Enrique Gómez.