En Riosucio refuerzan seguridad tras desplazamiento masivo
Por Noticias UrabáEl Ejército Nacional destinó un grupo de soldados profesionales para retomar el control en la zona de Truandó, donde los hostigamientos de grupos armados ilegales han desplazado a 72 familias indígenas hacia la cabecera municipal de Riosucio (Chocó).
De estos territorios han salido forzosamente decenas de pobladores de las comunidades de Peña Blanca, Pichindé y Taparal, quienes han sido victimas de amenazas y homicidios por parte de la guerrilla del ELN y la banda criminal del ‘Clan del Golfo’, dos estructuras armadas que mantienen una fuerte disputa por ese corredor estratégico del narcotráfico.
El coronel Yesid Ricardo González, comandante de la Fuerza de Tarea Titán del Ejército, aseguró que el refuerzo de militares se hace por vía terrestre, fluvial y aérea tanto en las riberas del Truandó como en otros importantes afluentes de esa parte del Darién chocoano, como respuesta a los alertas de la Defensoría del Pueblo y las autoridades locales.
“No solo en Truandó, en Domingodó, sobre el río Murindó, entre otros, inclusive preparamos a un grupo de soldados profesionales, listos para combatir, íntegros en todos los aspectos, pero ya están en estos sitios”.
Los operativos militares en la zona permitieron desmantelar un campamento de unos 20 miembros del Clan del Golfo, así como diferentes capturas de subversivos.
El oficia destacó además que se han recupedo diez menores que habían sido reclutados de manera forzosa por estos grupos armados en esa zona chocoana.
“Hemos recuperado diez menores indígenas y los hemos entregado a las autoridades competentes, en este caso, al Instituto de Bienestar Familiar. Rechazamos rotundamente una situación esta situación sobre los menores en las comunidades indígenas. No solo los amenazan el ELN, también el Clan del Golf», precisó.
En las últimas horas en el Chocó las Tropas de la Fuerza de Tarea Titán se incautaron dos arsenales de la guerrilla del ELN, con más de doce granadas, dos fusiles AK-47 y cientos de municiones.
El Ejército espera que los golpes a las estructuras armadas permitan que poco a poco las familias desplazadas sientan garantías para retornar a sus hogares.