Urabá - 22 marzo, 2022

En Chocó los jóvenes se están suicidando para evitar ser reclutados por los grupos armados ilegales

Por Noticias Urabá

Los Sacerdotes del Chocó confirmaron la versión del reciente informe de la Jurisdicción Especial para la Paz – JEP, en el cual se afirma que los jóvenes se están suicidando para evitar ser reclutados por los grupos armados ilegales.

El Presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana, Monseñor Luis José Rueda Aparicio, reveló que muchos jóvenes de las zonas alejadas de los departamentos y regiones donde se vive el conflicto armado están optando por quitarse la vida para evitar que sean llevados a las filas de los grupos guerrilleros y paramilitares que operan en sus regiones.

Tras una visita realizada al Chocó, Monseñor Rueda destacó que dicha situación fue confirmada por los sacerdotes de este departamento, quienes han sido testigos de esta delicada situación social, que compromete la vida de los jóvenes.

“Los jóvenes están optando por el camino del suicidio, y sabemos de muchos casos en las regiones, como en el Chocó, donde los obispos y sacerdotes son testigos de esa crisis humanitaria que estamos viviendo”, dijo el máximo gerarca de la iglesia católica en Colombia.

En este sentido, Monseñor Rueda señaló que los otros jóvenes están huyendo de sus regiones hacia las periferias de las grandes ciudades, huyendo en igual sentido de la posibilidad de que puedan ser reclutados por los grupos armados ilegales.

Recientemente, la JEP habló de cerca de 400 menores de edad que han sido llevados con engaños a las filas irregulares de estos grupos, situación que en el departamento de Risaralda fue confirmada por el Coordinador de la Mesa Departamental de Víctimas del Conflicto Armado, Eisenhower Dejanon Zapata, quien indicó que en esta sección del país son 53 familias las que no saben sobre el paradero de sus hijos.

El máximo jerarca de la iglesia en Colombia reiteró el llamado a los grupos alzados en armas, para que busquen el diálogo con el país, dejen a un lado las armas y desistan del reclutamiento de menores de edad en las comunidades indígenas y afrodescendientes de manera prioritaria.