La Administración Municipal de Apartadó, en conjunto con la SAMA y el grupo ambientalista NUN, plantaron 1000 árboles en compañía de la comunidad. Estos fueron ubicados en el cauce del río, en los barrios el Consejo, San Fernando, la Esmeralda y la Libertad.
La campaña de sembrado se realizó con el objetivo de evitar la erosión y el deslizamiento de viviendas en momentos de emergencia.
Los tipos de árboles sembrados fueron Pichindé y Caracolí, especies que por su raíz amarran los bordes del río. La empresa Dragados del Darién se sumó a la iniciativa y donó las plantas.