El Gobierno le hizo un nuevo llamado al grupo guerrillero para lograr la liberación.
Un mes de angustia completaron las familias del intendente de Policía Wilber Rentería, el subintendente Luis Carlos Torres, el patrullero Yemilson Leandro Gómez, el soldado Jesús Alberto Ramírez Silva y dos civiles que hacían parte de una embarcación contratista.
Los familiares de los secuestrados están a la espera que el Frente de Guerra Occidental del ELN y el Gobierno Nacional lleguen a un acuerdo que permita su pronta liberación.
El coronel Yesid Ricardo González Florian, comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta Titán del Chocó, hizo un nuevo llamado para que la guerrilla respete la vida de los secuestrados.
El oficial advirtió que no se han suspendido los operativos y que mantienen los controles del área, especialmente en las zonas aledañas al río Atrato.
El general González explicó que el Comité Internacional de la Cruz Roja sigue liderando las gestiones en Chocó para lograr la liberación de los cuatro uniformados y los dos civiles, de quienes se perdió el rastro cuando navegaban por un río desde Vigía del Fuerte hacia Quibdó.
La retención de estas personas ocurrió cuando los policías evacuaban al soldado de la zona de normalización que sirvió para desmovilizar a las Farc en el Urabá antioqueño, pues el militar afronta una grave enfermedad. Los dos contratistas, expertos en comunicaciones, trabajaban en las obras civiles que se levantaron en el espacio de reincorporación.