Mientras la Asamblea Departamental debatía sobre autorizar un estudio de factibilidad y conveniencia de un puerto marítimo en cualquier lugar del Urabá antioqueño, la compañía Wimpey, de Inglaterra, una de las más famosas del mundo en trabajos de esa magnitud, concluía un estudio sobre el particular y formalizaba la oferta de condiciones en las cuales está dispuesta a construir en esa región un puerto de doble muelle, bodegas y carreteras asfaltadas y de amplias especificaciones que dieran acceso al Océano Atlántico desde el interior del país.
Este importante estudio permaneció supersecreto hasta ayer, cuando el gobernador de Antioquia, Octavio Arizmendi Posada, reveló algunos de los más importantes aspectos. La inversión sería de 200 millones de pesos, sin que la Nación y el Departamento tengan que aportar un sólo centavo de sus presupuestos. La financiación sería para retribuirla con los rendimientos portuarios en un lapso de seis años, incluyendo los costos de las carreteras de acceso.