Los ocho policías que fallecieron en un ataque explosivo de Urabá, en la mañana del miércoles, acompañaban a autoridades judiciales (un juez y dos fiscales) y a funcionarios de la Unidad de Restitución de Tierras en un proceso de devolución de 21 hectáreas despojadas a campesinos por grupos armados, en el sector El Tomate en San Pedro de Urabá.
Así lo aseguró el mayor general, Gustavo Moreno, director de Carabineros y Seguridad Rural de la Policía Nacional, quien detalló que en El Tomate ya se han entregado 120 hectáreas de tierras que comprenden seis predios.
“Los uniformados eran los encargados de acompañar a campesinos y a los jueces a la hora de entregar nuevamente la propiedad que en algún momento les fue arrebatada por estructuras criminales de la zona”, añadió el alto oficial.
El general aseguró que se investiga si el hecho tiene relación con la devolución del terreno despojado por el ‘clan Castaño’, que empezó en ese sector.
También se investiga si tiene que ver con las acciones de operación Armagedónn, que realiza la Policía y las Fuerzas Militares contra estructuras ilegales como el ‘clan del Golfo’.
“Hubo enfrentamiento fuertes, estamos en línea con inteligencia, donde nos indican, que tres de estos sujetos fueron abatidos, estamos investigando si se trata de miembros de esa banda criminal”, añadió.
También detalló que los uniformados fallecieron cuando empezaban el desplazamiento en dos vehículos, que quedaron totalmente destruidos, “generando daño absoluto de las personas que iban en él, no hubo civiles víctimas”, añadió.
Asimismo, informó que los cuerpos fueron recuperados y se inició el proceso, de traslado de cuerpos a Medicina Legal de Medellìn, que hará la identificación y entrega a los familiares. “Ellos son oriundos de cinco regiones del país. Ellos eran personas buenas, que daban aporte y su vida a la comunidad un ejercicio de restitución de tierras, orientado a dar paz a los familiares”, resaltó.
El general además expresó la solidaridad de la institución por “estos valientes y valiosos policías, que les dé toda la capacidad a sus familiares para superar estos momento, estamos investigando”, recalcó.
La Policía anunció una recompensa de 40 millones de pesos para ubicar a terroristas que participaron a los responsables.
El presidente Juan Manuel Santos, por su parte, condenó de manera contundente el “ataque cobarde” contra los policías. “Este acto de barbarie no quedará impune e iremos detrás de los responsables”, señaló el mandatario.