¡Qué raro! Mientras las denuncias por despojos de tierra en Turbo, Antioquia, señalan que parte de estas están en poder del Gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria Correa y de su familia, desde la Gobernación del Departamento, este fin de semana, se le ha solicitado al Ministro de Transporte del Gobierno Popular, Guillermo Reyes, como una prioridad de Urabá, y no las otras vías, construir las vías que van justo a esos predios.
Si no me equivoco, una necesidad, sin duda, en las vías que son propiedad de los empresarios bananeros, que llevan años pagados con dólares por encima de los cuatro mil pesos.
El abogado Gerardo Vega Medina, cofundador con este servidor y otras 8 personas más de la hoy reconocida ONG Fundación Forjando Futuros, cuestionó, hace poco, en un debate en la Asamblea Departamental, al Gobernador, Aníbal Gaviria Correa y a su familia, por la posesión de tierras fruto del despojo en el municipio de Turbo, en zonas estratégicas aledañas a los proyectados puertos, hacia donde quieren orientar la inversión desde la Gobernación del Departamento.
Esa no es la primera vez que la familia Gaviria es señalada por estos líos de tierras adquiridas al parecer irregularmente. Hasta casi el momento de su muerte uno de los más recordados urbanizadores de Apartadó, el señor don Julio César Vásquez Virviescas, en intervenciones radiales y en todos los espacios políticos donde interactuaba lo decía, denunció que parte de las tierras de la reconocida finca Chinita, donde hoy está asentado el barrio Obrero, que fueran propiedad de la familia en cuestión, habían sido despojadas a la familia de una enfermera con asesinato de ésta al parecer incluido. Esto casi todo el mundo en Urabá, que tenga memoria, lo recuerda.
Sin embargo, pasando esa página, no deja de ser llamativo lo que sucedió este fin de semana en la Gobernación de Antioquia. ¿Por el bien de la gente en Urabá? (Por favor ver postdata)
Atentamente
FERNEY SUAZA MARÍN
Agosto 21 de El Año 02 desde La Pandemia (2022 en las malas cuentas de nuestra era).
PD: El debate sobre garantizar la inversión en el cuatrienio del Gobierno Popular en los proyectados puertos de Urabá hay que darlo.
¿Quién se puede oponer al desarrollo? Pero, siendo escasos los recursos, ¿es la prioridad de la gente en Urabá hoy?
Según el señor Manuel García, excandidato del Pacto Histórico al Congreso, afecto a los bananeros, y quien demandó a su propia compañera de lista y de partido, la Representante a la Cámara, Luz María Munera, sí.
Lo mismo se opina desde la Gobernación de Antioquia, del Gobernador bananero y con propiedades en inmediaciones a estos, como lo denunció el ex Diputado de Antioquia, Gerardo Vega Medina.
Pero, ¿Qué pensarán desde el Gobierno Popular del Presidente Gustavo Petro? En «Las Venas Abiertas de América Latina» el escritor Eduardo Galeano, cuando se refiere a los puertos, dice que estos cumplen una función extractivista y por eso a las multinacionales y a los poderosos países más ricos del mundo les encanta financiarles, porque les garantizan los minerales que no tienen a costa aún de la deforestación, del daño al medio ambiente y del endeudamiento de los pueblos de los cuales requieren les sean sumisos.
China creció de adentro hacia afuera, cuidando sus recursos; Lo mismo la República del Paraguay, en su época más próspera, en el siglo XIX, cuando el Dr. Francia les impidió a los británicos y a los franceses la navegación extractivista y el intercambio comercial injusto por sus aguas del río Paraná. Y así Creció, creció y creció hasta que tres países vecinos, afectos a aquellas potencias, le declararon la criminal guerra de la Triple Alianza y le sumieron en una pobreza hasta hoy.
Con los problemas grandes de Urabá hoy, ¿es prioridad los puertos?… Hay que hacerlos sin duda, pero ¿prioridad? Si un puerto se hace para la superación de la pobreza, Buenaventura, Tumaco, estarían boyantes y sin los complejos problemas económicos y sociales de hoy. Un debate que sería necesario abordar. Ahí les quedo.
Atentamente,
FERNEY SUAZA MARÍN
Agosto 21 de El Año 02 desde La Pandemia (2022, en las equivocadas cuentas de la era cristiana).