En una clínica de Montería se debate entre la vida y la muerte Jair Alexander Palacio Mosquera, estudiante de Medicina de la Universidad del Sinú, quien fue apuñalado presuntamente por un amigo a quien invitó a departir a su residencia, ubicada en el populoso sector de Robinson Pitalúa, al sur de la ciudad.
El joven, natural de Carepa, Antioquia, recibió 14 puñaladas en distintas partes del cuerpo. Los vecinos señalaron que escucharon gritos de auxilio en las horas de la madrugada y que por ello corrieron hasta el apartamento del estudiente para trasladarlo a un centro asistencial.
La persona que gritaba, según explicaron, sería el agresor, quien señalaba que habían intentado atracarlos. Sin embargo, esa versión fue desmentida posteriormente por las autoridades, quienes sindicaron a Martín Castañeda de ser el posible agresor.
Manifestaron que en el momento de los hechos, el supuesto victimario vestía una pantaloneta y un suéter de propiedad del estudiante de Medicina, pero al buscar evidencias dentro del apartamento, encontraron la ropa ensangrentada de Martín con sus documentos en el bolsillo del pantalón.
Los vecinos indicaron a las autoridades que en el momento no sospecharon que la misma persona que pedía auxilio, habría sido la responsable del hecho, pues de lo contrario lo habrían linchado en el mismo lugar. Hoy se desconoce su paradero.
La versión que maneja la Policía Metropolitana es que el estudiante había invitado a comer a su casa a Martín Castañeda y que tuvo que dejarle solo para hacer una vuelta, pero cuando regresó se dio cuenta que le hacían falta algunas pertenencias y cuando trató de reclamarle, el victimario se le abalanzó y le propinó varias puñaladas. Luego él mismo pidió auxilio a los vecinos.
Habitantes del lugar señalaron que Jair lleva dos años viviendo en ese apartamento y que nunca le habían conocido ningún tipo de problemas. Lo califican como un estudiante serio y responsable y manifestaron no conocer al amigo que estaba compartiendo con él, aunque advirtieron que reside en el barrio Cantaclaro, antigua invasión.
A las tres de la madrugada el estudiante ingresó a urgencias y a partir de ese momento los médicos están luchando por salvarle la vida, pues una de las heridas le perforó el pulmón y eso lo mantiene en grave estado de salud.