Jaime Herrera llegó a la gerencia del Hospital la Anunciación de Mutatá hace dos meses y medio. Recibió un hospital con muchas posibilidades de mejorar y por eso está tratando de hacer un diagnóstico donde se identifique cuáles son las necesidades y las falencias que puede presentar el hospital de Mutatá.
Es un hospital de primer nivel que necesita ponerle sentido humano, ese es el eslogan con el cual Herrera se ha identificado en esta institución. Inmediatamente le puso un sello personal a un hospital que trata de solucionar los problemas que tienen los usuarios en salud.
“Llegamos a trabajar, a poner a disposición de la comunidad nuestro trabajo, conocimiento, experiencia. Yo soy un hombre que conoce muy bien el sector público, con experiencia en la gerencia de hospitales y que hoy podemos hacer una muy buena gestión para mejorar la prestación del servicio, las condiciones laborales, infraestructura”, dijo el funcionario.
Muchos sectores
En el hospital de Mutatá se presentan muchas consultas por urgencia, aquí confluyen muchos sectores como el Chocó, los sectores cerca de Dabeiba, las comunidades indígenas donde hay algunos programas diferenciales con atención especial. Se tiene también el centro de salud en Belén de Bajirá que es casi un hospital de primer nivel porque allá hay urgencias, consulta externa, programas de promoción y prevención, salud pública y allá confluye mucha población de Riosucio, Carmen del Darién y otros sectores del Chocó.
“Tenemos grandes proyectos para este hospital y esta comunidad, lo primero es que vamos a fortalecer nuestros procesos; segundo vamos a tener un personal idóneo, bien preparado, organizado y capacitado para poder prestar un buen servicio, y tercero vamos a trabajar para mejorar la parte de infraestructura y dotación.
Hoy tenemos un hospital con una infraestructura deficiente, pero ya estamos trabajando para radicar varios proyectos en la gobernación y a nivel del ministerio de salud , vamos a adecuar el hospital de Mutatá y lo vamos a hacer en cuatro etapas; la primera etapa es del área administrativa, vamos a reorganizarla porque estamos trabajando hacinados, sin las condiciones mínimas para poder hacer un buen trabajo; segundo vamos a trabajar el área de urgencias, las urgencias del hospital también están en unas condiciones donde no cumplen con las condiciones de habilitación debido a múltiples circunstancias; tercero, el área de hospitalización y por último el área de consulta externa.
En Belén de Bajirá tenemos un centro de salud bastante grande, tenemos ya aprobado a nivel de la gobernación la remodelación del centro de salud, la dotación y una ambulancia que también vamos a gestionar para mejorar servicios allá”, aseguró el gerente.
Las EPS se han vuelto expertas en dilatar y no pagar.
En 2016, el presupuesto estaba en $ 6000 mil millones de pesos.
Situación económica difícil
Como la mayoría de los hospitales de Antioquia y de Colombia, el hospital de Mutatá tiene una difícil situación económica debido a que la cartera va aumentando todos los días de manera que algunas EPS se han vuelto expertas en dilatar la radicación de las facturas, expertas en no pagar, aunque no todas. Los hospitales a la vez se deben especializar en cobrar, en facturar muy bien, en hacer el cobro y que los recursos realmente lleguen para que haya buen flujo de caja y se pueda cumplir con las obligaciones.
Urgencias
Urgencias es un área que quedó pequeña ya que Mutatá es un municipio que crece todos los días, entonces se va a proyectar en parte de atrás del hospital que es un terreno bastante amplio donde se puede organizar un buen bloque de urgencias que cumpla con las condiciones mínimas de habilitación para prestar un muy buen servicio.
El año que pasó
“En el año 2016 trabajamos con un presupuesto de seis mil millones de pesos, este hospital tiene un presupuesto muy bajo, y para el 2017 no creo que suba mucho porque igual tenemos que hacer un trabajo donde recortemos costos y gastos donde vamos a mejorar los ingresos. Nosotros en los hospitales de primer nivel lo que hacemos es auto sostenernos con la venta de servicios y de la gobernación nosotros simplemente hacemos algunos convenios como los de Maná, como los de salud pública que son recursos que vienen del departamento y de la región, pero en sí no nos llega ningún recurso permanente, tenemos que ingeniárnosla para poder subsistir, mantener el equilibrio financiero, prestar un buen servicio y hacer es esto funcione de la mejor manera posible”, apuntó Herrera.
El hospital de Mutatá, que es un hospital pequeño relativamente, tiene una cartera de tres mil cuatrocientos millones de pesos, que es alta para un hospital de estas condiciones, entonces lo que se hace es primero que todo organizar bien.
Hay varios puntos que son vitales y son: facturación, hay que facturar puntualmente y de una manera eficiente.
Tener la cartera depurada, saber que EPS realmente nos deben y cuanto nos deben y lo tercero es hacer el cobro persuasivo y si no se puede lograr que se nos cancelen oportunamente las cuentas del hospital, tendremos que hacer cobros jurídicos o cobros coactivos, que eso agiliza el ingreso de los recursos.