Cuenta el entrenador de boxeo Abelardo Parra que entre el anochecer del sábado y el amanecer del domingo en las calles y la mayoría de tabernas de la zona de Urabá, especialmente en Apartadó y Turbo, los paisanos de Eléider Álvarez siguieron con entusiasmo la pelea por la defensa del título mundial semipesado de la OMB frente al ruso Sergey Kovalev.
Sin embargo, al final de los 12 asaltos y tras el anuncio de los jueces del triunfo del europeo, todo fue “desconcierto”.
“Esperábamos ver mejor a Eléider, el combate que hizo dista mucho de su potencial”, expresa el hombre que hizo parte de la formación deportiva del púgil antioqueño, y quien lo entrena cuando está de paso por la región.
En la primera pelea que pierde como profesional, al nacido en Apartadó hace 34 años, se le fue un invicto que acumulaba de 24 victorias, 12 de ellas por la vía del nocaut. La faja de campeón que le había arrebatado al mismo rival en agosto de 2018, por nocaut, solo le duró seis meses al antioqueño. La entregó en Texas, Estados Unidos.
Este domingo y luego de conversar con Eléider, a quien solo atinó a darle mensajes de motivación, Parra hizo un análisis de los aspectos que, para él, fueron determinantes en el desenlace del pleito.
“Primero, considero que hubo exceso de confianza en la preparación. Segundo, vi muy nervioso, carente de distancia e indeciso a Eléider durante todo el combate. Y tercero, aunque no soy nadie para criticar a un colega, creo se equivocaron al utilizar la misma estrategia de cuando ganó la corona ante Kovalev en la pelea anterior”.
Abelardo Parra, quien calificó la pelea como “sosa”, considera que era aceptable acudir a una idéntica táctica al comienzo, pero que si en los primeros asaltos esta no daba los resultados esperados, la esquina debía cambiarla.
Su recomendación, por ahora, es que el paisa descanse y reciba ayuda para “fortalecerlo mentalmente” de cara a sus próximos compromisos.
