Juan Carmelo Martínez, o ‘Juanmares’, conocido como el hombre de bigote robusto y alegre del Urabá, no hay quien lo desconozca, pues su forma de ser y su andar con libros por todo lado ha hecho que se convierta en un ícono de enseñanza en poblaciones que históricamente han sido atacadas por la violencia.
Juanmares, a sus 51 años, es licenciado en español y literatura y va a los colegios a “engatusar” a los muchachos por la lectura y la creatividad literaria.
‘Don Carmelo’ dice que busca que los menores se enamoren también de la poesía, quienes lo llaman ‘el Quijote de la bicicleta’ porque llega a Apartadó en su vehículo de dos ruedas para recrear su pasado y sus recuerdos a través de las letras.
Este hombre solo pretende que las letras, aunque no den riqueza, se conviertan en el espacio de autonomía para que el camino de crecimiento sea justamente la educación y la creatividad. No se sabe si de alguna de las zonas urabeñas se forme un nuevo García Márquez o un José Asunción Silva.